Durante
la época de vacaciones, las piscinas resultan un lugar muy atractivo para
disfrutar unos días de relajación, desahogo citadino y encuentro con familiares
y amigos. Tan vital como utilizar bloqueador solar, es tomar en cuenta que la
piscina esté en condiciones óptimas para su uso sin que afecte la seguridad
personal y, aun cuando el agua fría pueda producir un mini infarto, otros
factores también deben ser considerados antes de introducirnos confiadamente en
una piscina.
Seguramente
en ocasiones al abrir los ojos en una piscina esto les ha producido ardor, pero
contrario a lo que comúnmente se cree, la reacción no se debe a la
concentración de Cloro en el recinto sino al nivel de pH del agua.
El
potencial de hidrógeno o pH es la medida de acidez o alcalinidad de una
solución y se mide en una escala de 0 a 14.
En espacios como las piscinas es ideal que dicha medida se ubique en un
número entre 7 y 8, lo que garantizaría un pH neutro en el agua. Además este
nivel influye en la eficacia del Cloro, en este sentido el cloro desinfecta 10
veces más con un pH de 7,2 que con uno
de 9,2.
Otro
elemento importante en el análisis del agua es el Ácido Cianúrico. Este se
emplea para estabilizar el desglose o la descomposición del Cloro,
especialmente cuando la piscina está al aire libre y recibe directamente luz
solar. Si el Ácido Cianúrico está en una concentración demasiado alta,
producirá que el Cloro pierda completamente su capacidad para desinfectar el
agua, por esto la concentración del Ácido Cianúrico se debe mantener por debajo
de los 40 ppm (partes por millón) para garantizar la operación óptima del
Cloro.
Finalmente,
la cantidad de cloro que se agrega a una piscina es un tema que no se debe
descuidar. Para los dueños del recinto y para sus usuarios es importante tomar
conciencia de la presencia de este elemento que funciona como desinfectante
pero que en exceso puede resultar perjudicial para la salud y producir en
ocasiones irritaciones en la piel.
La
sugerencia para la concentración ideal de este elemento en espacios como
piscinas y spa es entre 1 y 3 ppp (partes por millón). Así pues, es
recomendable que los niveles de cloro sean evaluados diariamente para
considerar si se debe agregar en mayor cantidad o si debe ser omitido para
lograr una dosis correcta, lo que a su vez garantiza su efectividad.
Cloro,
Ácido Cianúrico y pH son tres factores vitales para garantizar la calidad de
agua en piscinas y spa. Medir regularmente sus niveles le permitirá disfrutar de un excelente día de sus
vacaciones sin tener que preocuparse más allá de lograr un buen bronceado.
¡Felices
vacaciones les desea Advance!
La verdad es que hay que llevar mucho cuidado con el cloro en las piscinas ya que puede causar irritación en los ojos o en la piel.
ResponderBorrarUn saludo.
Así es amigo, ¡Gracias por tu comentario!
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