Los
nitratos son sales provenientes del ácido nítrico y más allá de ser
conocidos por sus beneficios, son
populares por ocasionar la metahemoglobinemia o también llamado “síndrome del
bebé azul”.
La
metahemoglobinemia es un trastorno sanguíneo en el cual se produce de manera
anormal una cantidad de metahemoglobina. Tiene afinidad por el oxígeno y no lo cede
a los tejidos del organismo. Es por ello, que cuando se padece esta enfermedad,
la hemoglobina es incapaz de liberar eficientemente oxígeno a los tejidos del
cuerpo.
Algunos
síntomas son coloración azulada de la piel, convulsiones, discapacidad
intelectual, fatiga, dolor de cabeza, dificultad respiratoria, entre otros. Los bebés son los más propensos a contraer
dicha enfermedad.
Por
otra parte, existe mucha controversia con respecto a los nitratos ya que
también cuentan con una serie de beneficios. Los nitratos son utilizados en
muchos medicamentos, se utiliza para la conservación de muchos alimentos ya que
impide el crecimiento de hongos y bacterias. Además, el mismo cuerpo humano
produce nitratos.
Sin
embargo, en los últimos años se han realizado distintos estudios que
desvinculan la relación directa de los nitratos con el cáncer e inclusive con
la metahemoglobinemia.
Los pocos casos que se conocen de metahemoglobinemia,
fueron causados por teteros (biberones) sin desinfectar y por sopas de
zanahorias dejadas a temperatura ambiente, lo que favoreció a la proliferación de
bacterias y con ayuda de los nitratos presentes se produjo la enfermedad.
Es
importante destacar que los nitratos están presentes naturalmente en muchos
alimentos como los vegetales, las carnes, embutidos, las cervezas hasta en el
humo que produce el tabaco.
No
hay que alarmarse con respecto a los nitratos ni mucho menos dejar de consumir
vegetales o embutidos, ya que los nitratos no representan ningún riesgo para
nuestra salud siempre y cuando se consuman con moderación.
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