miércoles, 16 de septiembre de 2015

Cloración Salina




            En algún momento de tu vida tuviste que haber pasado por un detector de metales, este instrumento funciona mediante una serie de impulsos electromagnéticos que se encargan de identificar los objetos. Este proceso es muy parecido al que se realiza con la cloración salina, en el cual se le añade al agua cloruro sódico, que no es otra cosa que sal común,  y se hace pasar el líquido por un aparato eléctrico con dos láminas de titanio que hacen el trabajo de electrodos. Luego del contacto de la sal con el metal, la primera se convierte en un purificador y desinfectante activo para tu piscina que se encargará de eliminar los hongos y bacterias que puedan encontrarse allí; lo curioso de este proceso es que la sal vuelve a su estado natural y el ciclo a repetirse de manera indefinida.